La habilidad de diferenciar células cancerígenas de células epiteliales normales mediante el microscopio de luz es fundamental para un diagnóstico citológico preciso. Las principales características morfológicas que distinguen entre células epiteliales benignas y malignas se resumen en el cuadro siguiente:
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Células benignas |
Células cancerígenas |
Tamaño y forma celular |
Dentro de los límites fisiológicos reflejando la división celular normal y la maduración del epitelio |
Variación del tamaño y forma reflejando división celular y maduración anormales |
Tamaño nuclear |
Dentro de los límites normales reflejando división celular y maduración normales |
Variación significativa del tamaño nuclear (anisocitosis) reflejando división celular y maduración anormales. |
Forma nuclear |
Generalmente redondas, ovales o en forma de alubia |
Forma anormal |
Estructura de la cromatina en el núcleo en interfase |
Cromatina finamente granular uniformemente distribuida por todo el núcleo |
Cromatina granular gruesa irregularmente distribuida por todo el núcleo
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Contenido de cromatina en el núcleo en interfase |
Cromatina granular gruesa irregularmente distribuida por todo el núcleo |
La cromatina usualmente aumenta pero la cantidad y su distribución varían de un núcleo a otro debido a la división celular anormal. |
Hipercromasia |
Raramente visto, si está presente refleja cambios regenerativos |
Común reflejando un aumento en la cantidad de cromatina o un recambio celular rápido o ambos |
Multinucleación |
No encontrada normalmente. Si está presente los núcleos son de tamaño uniforme |
No es común. Los núcleos varían en tamaño y forma |
Nucleolos |
Pequeño, tamaño uniforme, poco numerosos |
Grande, irregular, de tamaño y forma variables y en números variables |
Cohesividad |
Uniones celulares bien formadas |
Pérdida de la cohesividad |
Mitosis |
Ocasionalmente visto en la capa basal del epitelio |
Las mitosis anormales se encuentran frecuentemente por todo el epitelio |
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. Las diferencias que se muestran en el cuadro anterior reflejan los patrones de crecimiento anormal de la célula cancerigena que tiene la habilidad de evadir los controles de división celular y maduración que determinan la estructura normal del epitelio.
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. Las células cancerígenas adquieren la habilidad de dividirse; una propiedad que normalmente se presenta solamente en las capas basales (capas germinales) del epitelio. En consecuencia, las células cancerígenas tienen un crecimiento superior y desplazan las células normales del epitelio para formar tumores. Estudios recientes han demostrado que los tumores a menudo crean su propia suplencia sanguínea - un proceso llamado angiogénesis tumoral. Sin embargo, cuando el crecimiento del tumor excede el suministro de sangre, el tumor se necrosa y ulcera favoreciendo la infección.
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. El rápido crecimiento de las células cancerígenas a menudo resulta en errores durante la mitosis (división celular). Esto lleva a la distribución irregular de la cromatina entre las células de cáncer hijas, que a su vez se refleja morfológicamente en la variación en el tamaño del núcleo, la forma, y el contenido de cromatina observado en células cancerígenas en frotis cervicales y cortes histológicos.
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. Las células cancerígenas también pierden la cohesividad de las células normales lo que les permite migrar e invadir. Como resultado de la pérdida de cohesividad, las células cancerígenas son exfoliadas mucho más fácilmente que las células epiteliales normales, lo que explica la sensibilidad de la citología exfoliativa como método de detección de lesiones cancerígenas y pre-cancerígenas en los frotis o extendidos cervicales.